Veinte buzos buscan aún al catalán desaparecido en un río de México

México. (EFE).- Unos veinte buzos rastrean el río Tachanchín, en México, en el que desapareció hace doce días el español Francesc Espasa Nolet, al volcar la lancha en la que viajaba con cinco compatriotas para ver una cascada. Fuentes de Protección Civil del estado de San Luis Potosí, donde tuvo lugar el accidente, informaron a Efe de que no hay una fecha prevista para dar por cerrada la búsqueda, pese a que las esperanzas de hallarlo con vida son casi nulas.
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En un principio fueron cerca de cien efectivos, junto a soldados y lugareños, los que participaron en las tareas de rescate. Hasta el momento, se han localizado los cuerpos de otras tres chicas españolas que viajaban con el desaparecido y también fueron arrastradas por el río. Dos de los turistas lograron salir de la corriente y ponerse a salvo.

Las labores de rastreo debían haberse extendido al cercano estado de Veracruz, ya que el río Tachanchín entronca con el Moctezuma y recorre unos 50 kilómetros de territorio veracruzano hasta desembocar en el Golfo de México. Sin embargo, las autoridades de Protección Civil de Veracruz reportaron que no han tenido solicitud alguna para realizar labores de búsqueda.

La embajada española en el país repatrió la semana pasada los tres cuerpos hallados y afirmó que insistiría con el Gobierno mexicano en mantener el rastreo. Los jóvenes fueron abordados por un guía que les prometió llevarlos por una ruta segura a la cascada de Tamul, en la selvática Huasteca potosina, a pesar de que las condiciones meteorológicas no lo aconsejaban.

El lanchero que los llevaba por el río -que iba muy crecido por las lluvias- los abandonó antes de llegar a la orilla opuesta, asustado por la fuerza del agua. Los intentos de los jóvenes por agarrarse a alguna rama y detener su avance río abajo fueron infructuosos y la balsa volcó. Sólo Bernat Palau Tomas y Aina Frau Pascual lograron salvarse; el resto de sus compañeros fueron arrastrados por las aguas del Tachanchín. Tanto el guía como el lanchero están en prisión.